COMUNICADO

En 1945, el coronel Perón recibió al embajador de Estado Unidos, Spruille Braden, quien le llevó una suerte de "pliego de condiciones" y terminó su ofrecimiento diciendo: “Créame señor presidente, que si usted hace todo esto será muy bien considerado en mi país”. El coronel Perón le contestó: “Vea señor Embajador: a mi no me interesa ser muy bien considerado en su país al costo de ser un hijo de puta en el mío”.

El Braden de hoy se llama Peter Lamelas. Y su interlocutor no es Perón, sino un cipayo dispuesto a "lamerlas a pleno" que se llama Javier Milei. Lamelas anunció sin prurito alguno ante el Congreso de EE.UU. que viene al país para asumir las riendas de la colonia. Pero, ojo, que el que las lame y Lamelas no nacieron por generación espontánea. Son el fruto podrido que deviene de las ramas secas del árbol del campo popular que, estando en el gobierno, se negaron a recuperar el Paraná y los puertos, la flota mercante, los astilleros, el comercio exterior, a derogar las leyes de entidades financieras y de inversiones extranjeras, a estatizar las energéticas, a recuperar la jurisdicción argentina para los conflictos con empresas extranjeras, a repudiar la odiosa deuda externa y sentaron las bases del modelo extractivista, agroexportador, ultrafinanciarizado y semicolonial  en suelo patrio para saquearlo y destruirlo.

La sumisión colonial no se limita al silencio del gobierno y sus cómplices ante la oprobiosa ofensa a la dignidad argentina. Se manifiesta en hechos bien concretos: alineación incondicional a EE.UU., Inglaterra e Israel; entrega de la base naval integrada de Tierra del Fuego a la OTAN y, con ello la cesión fáctica del Estrecho de Magallanes y el canal de Beagle, la postergación de la causa Malvinas y la puesta en tela de juicio de los derechos argentinos sobre la Antártida, cuyo tratado se rediscutirá en poco más de veinte años. Se expresa también en el anuncio de la privatización de las empresas argentinas que quedan en pie o fueron recuperadas, como el caso de AYSA S.A., en cuyo pliego de licitación ya incorporó el gobierno cipayo de Milei el derecho de la concesionaria a cortar totalmente la provisión de agua, ya no sólo para las industrias, sino también para lo usuarios que no paguen un mes del servicio. Cipayo Milei que es un discípulo aventajado de Nicolás Avellaneda que, como él, pasa a concretar la entrega nacional sobre el hambre y, literalmente, "LA SED" de los argentinos. Y pareciera que la concesionaria tiene nombre y apellido: MEKOROT, empresa israelí que en el marco del genocidio del pueblo palestino agudiza su sufrimiento privándolo hasta de la provisión de agua potable y que, traída al país por Wado de Pedro en 2022, hoy tiene el control de nuestros acuíferos en 7 provincias argentinas.

En 1945 la afrenta del embajador yanqui se convirtió en carta de triunfo nacional y popular bajo el lema "Braden o Perón. Como hoy no hay sustituto de Perón, son los argentinos y argentinas bien nacidos y sus organizaciones políticas, sociales y gremiales leales a LA CAUSA, los que debemos repudiar a Lamelas, al que se las lame y a todos sus cómplices.

¡MOVILIZACIÓN MASIVA CONTRA LA PRESENCIA DE PETER LAMELAS , TODO EL GOBIERNO CIPAYO DE MILEI EN EL PAÍS Y EL FIN DEL MODELO COLONIAL!