La violencia Laboral es una forma de abuso de poder que tiene por finalidad someter o excluir a un trabajador de su lugar de trabajo.

Es imperioso tener presente que la violencia laboral constituye un incumplimiento o abuso de los derechos laborales y humanos que son fundamentales para el bienestar y desarrollo de los individuos. Erradicar la violencia y el acoso en el mundo del trabajo requiere del compromiso de las organizaciones sindicales, y nos exige una nueva mirada sobre como definimos al trabajador, como sujeto de derecho.

Los datos de ejercicios abusivos hacia el trabajador son alarmantes nos muestran que 7 de cada 10 trabajadores en nuestro país sufren o han  sufrido violencia en algún momento de su vida laboral, las cuales pueden haber sido ejercidas tanto por una figura de autoridad como por uno o más compañeros de trabajo del mismo rango.

En el año 2017 la organización mundial de la salud define a la violencia laboral como la plaga del siglo XXI, visibilizando la necesidad de trabajar en la prevención e erradicación de esta problemática e interpelando a las organizaciones sindicales sobre el rol que debemos tomar ante ella.

Generar espacios de atención  para  los trabajares, capacitar a comisiones directivas, cuerpos de delegados, diseñar protocolos de actuación ante situaciones de violencia laboral, establecer normativas claras y explicitas en los estatutos de las organizaciones sindicales forma parte de ese compromiso debe darse, teniendo en claro que la violencia laboral no escapa a las organizaciones sindicales.

Investigaciones recientes emitidas por el observatorio de la oficina de violencia laboral del Ministerio de Trabajo sobre este tema arrojan datos interesantes para el abordaje de  esta problemática ello revela que: El perfil de los consultantes es 71% femenino 29% masculino, el tipo de violencia que se ejerce es 90% psicológica, 5 % sexual, 5 % física.

Los motivos más frecuentes para el ejercicio de la violencia laboral son: ACCIDENTES LABORALES, EMBARAZO, ESTRATEGIA ORGANIZACIONAL, RECLAMOS LABORALES.

El perfil de los o las acosadores es posición superior 83%, 16 % par, 2 % inferior, las consecuencias que desencadenan son físicas, psíquicas y social y que a pesar de esto solo el 37 % accede a realizarse tratamientos y que los tipos de tratamientos más asiduos son 40% medico, 33% psicológico y 27 % psiquiátrico.

Para finalizar considero que posible construir un futuro de trabajo enfocado en las personas, para esto debemos trabajar asiduamente el cumplimiento de los derechos fundamentales de los y  las   trabajadorxs, como así también en la promulgación de legislación que lo garanticen la creación de políticas  públicas orientadas a este fin.

Ya en el siglo XIX Karl Marx decía, “El obrero tiene más necesidad de respeto que de pan”.

Por Paula B. Perisse Subsecretaria de Violencia Laboral AGTSyP.